19 octubre 2007

"Sí al procés de pau"; ¿recogemos los muebles? Y los jueces ¿a qué juegan?



Os habréis fijado que hasta hoy he mantenido en mi blog el logotipo de "Jo també dic SÍ al procés de pau", que enlaza directamente con esta página. Esta página, en formato blog, era la portavoz de la Iniciativa Ciutadana i Social per la Pau, la formaban numerosas entidades ciudadanas, sindicales, políticas, etc. Llevaron a cabo diversos actos apoyando el diálogo para el proceso de paz en Euskadi. Pero al final quedó muda para siempre. No me invento nada si digo que esta página dejó de funcionar presumiblemente cuando ETA atentó contra el aeropuerto de Barajas. Cierto es que meses antes no había aparecido noticia alguna en dicho medio, pero también es cierto que no era un blog que se actualizase a diario ni demasiado periódicamente, si no era para anunciar alguna convocatoria o poner, muy de tanto en tanto, alguna noticia ocasional. No nos llevemos a engaño, cuando ETA provocó el atentado a mucha gente se le produjo un nudo en la garganta. Era imprevisible; ¿quién podía esperar un atentado por parte de ETA? ¿Era realmente imprevisible?

He mantenido el logotipo y el enlace en mi blog por dos motivos principalmente:

  1. Porque continuo pidiendo un diálogo encaminado a un proceso de paz, porque a las malas ya vemos lo que está sucediendo. Las armas no se callan con armas y menos cuando detrás no hallamos un grupo concreto, limitado, y localizado de personas. Esta clase de grupos se va retroalimentando, debido a su tipología y debido presumiblemente a los motivos de su existencia, por mucho que podamos pensar que ésta es injustificable
  2. Porque lo guardaba para poder hacer un escrito sobre ello, al cual por fin, hoy le ha tocado ver la luz
Durante todo este tiempo no he cesado de mirar el blog sobre "sí al procés de pau, e, invariablemente, se ha mantenido callado durante todo el tiempo. Dicho blog ya ha muerto, así ¿que hacemos? ¿recogemos los muebles?

Antes de empezar este escrito, he realizado una captura de pantalla del blog en cuestión (por si desaparecía), dado que, durante muchos meses, me han estado rondando una serie de asuntos por la cabeza; veamos que hay escrito en los dos últimos artículos del blog, en el penúltimo:
La campaña "Sí al Procés" pide que no se excluya a la izquierda abertzale de las próximas elecciones municipales, .... etc.
y después, en el último:
sialproces | martes, 15 de mayo de 2007 | 11:00h

La ratificación por parte del Tribunal Constitucional de la sentencia del Tribunal Supremo sobre las listas de la izquierda abertzale ilegalizada ha confirmado nuestras peores expectativas para el proceso de paz. Privilegiando la Ley de Partidos sobre la ley electoral, los tribunales han decidido favorecer la vuelta a un contexto político anterior al alto al fuego, una situación pasada que debería quedar superada. Injusta en su momento, la Ley de Partidos lo sigue siendo en la actualidad, dificultando el diálogo y la construcción de la paz. Se trata de una Ley elaborada expresamente contra un colectivo y, por tanto, es una ley que golpea el Estado de Derecho.


Ved la captura de pantalla. Ya lo sabéis, sólo es necesario hacer clic sobre ella:



¿Una relación causal, tal vez? El blog para el proceso de paz nos advertía que los tribunales estaban haciendo una cosa muy "fea" porque, como allá se afirmaba, la Ley de Partidos "es una ley que golpea el Estado de Derecho". Y cuando se hace una cosa muy fea, o sea, cuando las cosas se hacen mal, puedes temer unos resultados inesperados y desagradables.

¿Resultados inesperados? Quizás no tanto, porque tal como nos advertía el reverendo Alec Reid (el cual ha intervenido como intermediario en algún momento del supuesto proceso de paz), en el programa La nit al dia de TV3, cuando se está tratando con un grupo de las características de ETA, debes ponerte en la cabeza de los que están dentro; debes tratar de pensar del modo que ellos lo hacen, si es que quieres llegar realmente a conseguir la paz y no sea que tu interés esté más centrado en el resultado de las próximas elecciones al parlamento español. ¡Al tanto!, no estoy diciendo que haya que justificar la forma de pensar y de actuar de ETA, ni remotamente, pero si quieres la paz negociada, tal como se pretendía entonces, debes ir directamente al objetivo y no ir poniendo piedras en el camino. En todo caso, de ello tendremos tiempo para hablar, tengo en mente un post sobre las reflexiones de Alec Reid en La nit al dia.

Lo que pretendo decir es que cada vez que leía aquellas dos últimas entradas en el blog pensaba que, casualmente, los razonamientos que se estaban llevando a cabo, al final permanecieron en el tiempo como una especies de presagio, como una premonición, y después como un testimonio, de lo que sucedió. (Con tal cosa no estoy diciendo que en el blog se estuviera formulando una amenaza, no confundamos las cosas, que hay mucho malpensado por el mundo). Y es que, dejando de lado el pobre papel del gobierno español en aquella negociación que nunca empezó -teniendo la vista más puesta en las próximas elecciones y en las tristes maniobras del PP- tal como también afirmó Alec Reid- lo que sí es cierto y cada día tengo más claro es que, en el estado español -tal como también decía Alec Reid precisamente- el poder judicial tiene demasiada fuerza, demasiada impunidad, manda más que nuestros representantes políticos. Nos dicen, "pero es que en un 'estado de derecho' debe darse la separación de poderes". Pero nosotros no elegimos a los miembros del poder judicial. Nuestros representantes legales, que ya no sé si legítimos, son el parlamento y, por derivación, también el gobierno.

Pues bien, ese es el problema. Los jueces muy a menudo tienen la sartén por el mango. Los jueces pueden decidir cosas inverosímiles con total impunidad. El tribunal constitucional que, últimamente, se asemeja más a una atracción de circo que no a un tribunal, que lo formarán al final no sabemos bien del todo si 8, 10 o 12 personas, como se comentaba también hace tres noches en La nit al dia, por ejemplo, pueden tirar atrás un Estatuto aprobado y pasado a consulta por los ciudadanos pertinentes. 8, 10 o 12 personas pueden permitirse el lujo de cambiar un Estatuto, si se les antoja, aprobado por millones de personas, con total impunidad, interpretando a su manera la "santísima" e intocable Constitución Española. Ni nosotros queríamos este Estatuto negociado entre el partido de la oposición y el gobierno español, ni tampoco queríamos el que se aprobó anteriormente en el parlamento catalán, por dos motivos: porque tampoco había sido un estatuto en el que la ciudadanía hubiese tenido demasiada voz en su redacción y porque nosotros no queríamos un Estatuto sino un proceso constituyente, porque nosotros, quieran o no los nacionalistas rancios españolistas, somos una nación. A pesar de todo, éste es un Estatuto negociado y aprobado en dos parlamentos y ratificado después por una nación, o por un pueblo si queréis, dentro del marco de la legalidad vigente y, a la postre, ya está siendo aplicado.

Al final, yo digo lo siguiente: los jueces, en una supuesta democracia, no han sido elegidos por el pueblo, sin embargo gozan de un poder exacerbado y de una impunidad injustificable. El juez puede retenerte en prisión preventiva durante años, sin que seas tal vez ni siquiera culpable de cosa alguna, sin embargo dado el caso ni tan sólo se disculparán, y, además, pueden decidir por todo un pueblo sin haber sido elegidos por éste.

Y finalmente acabo diciendo: los jueces te juzgan y juzgan los pueblos, y pregunto: ¿y quién juzga a los jueces?

No hay comentarios: