20 septiembre 2007

Sobre 'radicales' e 'independentistas'

Continuando con el escrito anterior titulado Manipulaciones, medias verdades, "interpretaciones"..., quiero demostrar las aberraciones "lingüístico-políticas" que cometemos cuando hablamos tan a menudo con la intención, consciente o inconscientemente, de desprestigiar, en general, según qué movimientos sociales, ideologías, etc.

Hoy me centraré en el término 'radical', el cual utilizamos a menudo para referirnos a personas que están más allá de la "corrección política" o fuera de los límites "de lo democrático" o que, a juicio de algunos, actúan como "terroristas", o que quieren cargarse el estatus social de "toda la población", o que son peligrosas para la "paz social" y el llamado "estado del bienestar", o cosas por ese estilo.

Ya sabemos que la lengua es un elemento vivo y que su estructura gramatical, su vocabulario, etc., varían y se adecuan en el tiempo conforme al uso que de ellos hacemos las personas. Pero es evidente que necesitamos fundamentarnos en definiciones claras y distintas de los conceptos para saber que todos hablamos de la misma cosa cuando nos comunicamos, de lo contrario nuestra comunicación sería confusa y daría resultado a contínuas interpretaciones erróneas, y, está claro, que no nos entenderíamos en absoluto al comunicarnos entre nosotros.

Partiendo del caso de que la lengua está viva y que la definición de los términos tiene que surgir des de un punto de vista democrático, si queréis, no tan academicista, he ido a mirarme la Wiquipedia para comprobar qué descripción lleva a cabo sobre el término 'radical'. Nada más de lejos de la interpretación que solemos hacer una gran parte de las personas, incluyendo periodistas y gente del mundo de la política, y de la política "de izquierda" obviamente:

"El término radical viene del latín radix ("raíz"), significa así de raíz o de base, refiriéndose sobre todo a un punto de vista profundo, sustancial, más aún si es aplicado a alguna convicción, práctica, análisis o propuesta. No confundir con fanático o extremista que tienen otros significados ajenos a una visión profunda de las cosas.

Según el contexto radical puede significar:

En política:
Por no dejar de lado la parte academicista, que también nos es útil y siempre nos ha servido de referencia básica para saber de qué hablamos cuando nos referimos a un concepto -¿quién no consulta un diccionario cuando precisa saber qué significa determinada palabra?- ahora os pondré la definición de 'Radical' que lleva a cabo el "Gran diccionari de la llengua catalana" de la Enciclopèdia Catalana: (que es el que yo normalmente tengo por costumbre hacer servir por el "prestigio" de dicha enciclopèdia):

"... POLÍT 1 adj Dit dels diversos partits seguidors del radicalisme ... " (Dicho de los diversos partidos seguidores del radicalismo)*

A continuación consulto el concepto 'Radicalismo':

"... HIST /POLÍT Corrent de pensament polític que propugna, d'una manera democràtica, reformes profundes o canvis substancials de les estructures polítiques i socials de l'estat."
(Corriente de pensamiento político que propugna, de una manera democrática, reformas profundas o cambios substanciales de las estructuras políticas y sociales del estado)*


Y, para ir dejando por hoy ya las definiciones, solamente extraeré alguna reseña de Wikipedia, por ejemplo, del Partido Radical de Izquierda francés, que con dicho nombre debería hacernos pensar casi en espantosos terroristas, como mínimo; pues todo lo contrario:
" ...Partido Radical de Izquierda (en francés Parti Radical de Gauche - PRG) es un partido menor de centro-izquierda francés. Fundado el 4 de octubre de 1972 como una escisión del Partido Radical y Radical Socialista. El PRG apoyó la candidatura de izquierdas de François Mitterrand. Surge de una tendencia interna (GEARS) formadas en 1971. Tuvo su apoyo en sectores de la clase media y de las tradicionales zonas radicales del sud-oeste de Francia. Desde 1971 mantiene una alianza electoral con el Partido Socialista por medio de la cual integra sus listas electorales ... "

¡Increible! Fijaos bien que ser radical, al fin y al cabo, es estar dentro de la normalidad más ordinaria del sistema político, es ser democrático, no extremista, ni fanático, de tal manera que el mismo partido radical francés es de centro izquierda. ¿De donde proviene entonces la manía de "demonizar" el concepto 'Radical'. ¡Huy!, yo que voy a ser malpensado ya tengo la solución, miremos un extracto de la definición de Wikipedia: "alguna posición que busca ir al fondo o raíz de las cosas, como por ejemplo los ácratas"

Aquí, seguramente, radica el problema, los "ácratas", los "anarquistas", los "libertarios", ellos son para todo el mundo la "chusma", el diablo, el mal a extirpar de esta sociedad. ¿Por qué? Porque quieren ir a las raíces, al fondo de las cosas (podríamos así deducir: a la "verdad"), a la unidad, a lo más simple y primario, a redescubrir y recuperar al individuo como ser natural y libre, al individuo como persona. ¿Qué tiene de malo que los anarquistas sean los auténticos "investigadores", los que quieren partir de la duda (poner en duda el sistema político, económico y social) e ir más allá, descubrir y reparar el mal funcionamiento de esta sociedad, cuando a la postre, Descartes, un filósofo tan respetado por nuestra sociedad liberal, propugnaba también llegar a las raíces, al fondo de las cosas (a lo más simple) y, a partir de ello, volver a "reconstruir" (de lo más simple hacia lo complejo)? Fácil de entender, porque ello significa "revolucionar" el sistema, romper con los principios actuales de competitividad, individualismo egoista, ánsias de poder, ánsies de acumulación de bienes privados, acomodación del pensamiento y de la acción, etc. Porque tal cosa significa la "revolución".

Y por dichos motivos, también los "independentistas" que buscan ir a la primera forma y a la raíz desde donde debe conformarse la sociedad o la comunidad (lo más cerca de la unidad básica): la política de proximidad, lejos de los centralismos imperialistas de los "Macro-Estados" (donde el poder se halla mucho más lejos de tu alcance) son tildados, consciente o inconscientemente, de "radicales".

Decía el otro día que "radical" e "independentista" podrian ser tal vez la misma cosa "desde un punto de vista gramatical", bien, era, una metáfora, evidentmente, pero sí que pueden tener ciertos paralelismos, porque el independentista pretende ir a la raíz del control político, descentralizar la política, pasar de la política de lejanía a la política de acercamiento o proximidad, llegar más cerca del control democrático por parte de la comunidad. Y ese precisamente es "el camino" del anarquista, cuando menos, uno de los fines del anarquismo "social" o socialismo libertario y/o anarquismo asambleario, si queréis: la descentralitazación del "poder" (de la política), llevar "el poder" (la política) a unitadades cercanas, lo más pequeñas posibles y controlables.

A la postre, las dos corrientes ideológicas propugnan lo mismo: libertad, independencia, autodeterminación y autogestión. Aunque al independentismo actual le hace falta un paso más allá (a pesar que muchos independentistas ya piensan en ello): la autogestión de los pueblos significa que "el poder" recae en los miembros de la comunidad, o sea, pasar de una democracia representativa a una democracia realmente participativa, directa o asamblearismo.

Concluyendo ya, miremos esta definición: "Corriente de pensamiento político que propugna, de una manera democrática, reformas profundas o cambios substanciales de las estructuras políticas y sociales del estado". Pues bien, es del todo evidente que aquí también coinciden independentismo y anarquismo, dado que las dos corrientes proponen llevar a cabo reformas profundas o cambios substanciales de les estructuras políticas y sociales del estado.

Sin embargo, ¿no nos encontramos ante una contradicción entonces? No, por supuesto que no. La definición nos situa siempre dentro de un ámbito democrático, no "extremista", no "terrorista". Democrático, o sea, es "el pueblo" quién debe formular y realizar las reformas no ningún rey ni emperador que dicta lo que debe hacerse. Me diréis: en Catalunya y en el País Vasco, por ejemplo, hay políticos y sus partidos que quieren y propugnan el independentismo. Cierto, pero los independentistas pretenden su objetivo independientemente de que los políticos y sus partidos se apunten a tal cosa. Muy a menudo los mismos independentistas suelen tener serias discrepancias con dichos partidos políticos. Sabemos que los políticos buscan el poder a cualquier precio y se apuntan a lo que sea por conseguirlo. Pero el hecho de que haya políticos independentistas no anula la "buena fe" del pueblo y/o de las persones que se sienten independentistas. El independentismo en sí mismo es una ideología que nace contra los grandes imperialismos que han ido absorbiendo a los pueblos libres a lo largo de la historia desposeyéndolos de todos sus derechos, y, especialmente de su derecho a ser libres. Mientras vivamos en un mundo donde los políticos existan, éstos siempre se apuntarán a una opción o a otra en la búsqueda de votos, lo cual no invalida las "opciones" en sí mismas.

Creo que por hoy podemos ir acabando, este escrito comienza a ser ya muy largo. Quedan aún cosas por analizar. Por ejemplo, hay alguna definición de 'radical' de tono más peyorativo desde el mundo académico, del mismo modo que de la palabra 'anarquismo' cosa que ya comentamos en otro momento. Pero bueno, eso queda para otra ocasión.

*Las traducciones al castellano de las definiciones del diccionario en catalán, son mías y se ajustan fielmente a lo expresado en catalán

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